Llevamos un mensaje de esperanza a los que están solos y sufren.
Imitamos el corazón de Dios cuando compartimos su preocupación por los huérfanos, los sin techo y los desamparados.
La religión pura y sin mancha delante de Dios nuestro Padre es esta: atender a los huérfanos y a las viudas en sus aflicciones, y conservarse limpio de la corrupción del mundo (Santiago 1:27). Además de estos, creemos que hay muchas otras personas que necesitan atención y apoyo. Como seguidores de Jesús, es una alegría vivir esta enseñanza bíblica entre todos los que necesitan experimentar el amor de Dios de forma tangible.
Oportunidades
Explora estas oportunidades para impactar en los pueblos marginados con uno de nuestros equipos en todo el mundo.