DIOS ESCUCHA
ORAR POR LAS NACIONES
Dios nos escucha cuando oramos según su voluntad. Lo vemos actuar en la vida de nuestros familiares, amigos, vecinos y colegas cuando oramos por las necesidades de los que están cerca de nosotros.
Sin embargo, más de 3 mil millones de personas en el mundo no conocen a Dios. A menudo, ellos ni siquiera conocen a un solo seguidor de Jesús que pueda decirles que Dios escucha sus oraciones. Muchas de estas personas se concentran en cinco zonas geográficas: el Sahel, la Península Arábiga, el Cáucaso Norte, el sur de Asia y el Mekong.
¿Te unirías a los creyentes de todo el mundo en oración por las personas en estos lugares que nunca han oído hablar del plan redentor de Dios? Juntos, oraremos por los seguidores de Jesús que están compartiendo audazmente el amor de Cristo en algunas de estas áreas. Y pediremos a Dios por más personas para que se unan a los que ya están allí para alcanzar a aquellos que no lo conocen.
Descarga la aplicación Prayer Reach
Prayer Reach es una aplicación para iPhone, iPad y dispositivos Android que funciona como un canal de oración. Tus oraciones se enfocarán en las comunidades del mundo donde las iglesias son pocas, y donde los seguidores de Jesús son menos o no hay ninguno. Al dedicar tiempo a la oración por las personas que aún no conocen el asombroso amor de Dios, alineamos nuestros corazones y mentes con los propósitos de Dios, y Él nos da entendimiento y sabiduría para su obra en el mundo.
VÍDEOS PARA INSPIRAR TU TIEMPO DE ORACIÓN
Actualmente, nos enfocamos en cinco regiones del mundo donde la mayoría de la población no ha tenido la oportunidad de escuchar el evangelio ni de conocer a un seguidor de Jesús.
Ve estos vídeos para saber más sobre los motivos de oración por las personas de estas regiones.
Personas de otras creencias
Orar es luz y amor
Como seguidores de Cristo, nos tomamos muy en serio la fuerte exhortación de Jesús a "amar a Dios y al prójimo".
Las personas de otras creencias son nuestros vecinos, y una forma de amarlos es orar por bendiciones sobre ellos, sus familias y comunidades, como también orar por las ciudades en las que viven.
